¿Es posible encontrar un hotel familiar y tranquilo en Peñíscola?
Peñíscola es uno de los destinos turísticos más populares de la Comunidad Valenciana al que cada año llegan miles de turistas dispuestos a disfrutar de su impresionante castillo templario, sus playas de ensueño y de un casco antiguo pintoresco que no para de estar en auge en las imágenes que se postean en redes sociales. Sin embargo, lejos de ese trasiego público, la pregunta que muchos se hacen es: ¿es posible encontrar un hotel familiar y tranquilo en este bullicioso destino? La respuesta es sí.
Por suerte, hay establecimientos que, aún hoy, siguen velando por cubrir la demanda familiar y, sin renunciar al centro de la localidad y a la proximidad con sus playas, ofrecer un descanso merecido para quienes busquen este tipo de estancias.
El reclamo turístico de Peñíscola
Peñíscola sigue siendo uno de los destinos preferidos por turistas nacionales e internacionales gracias a su historia, paisajes y a una oferta cultural variada.
No se puede hablar de la localidad sin mencionar el Castillo del Papa Luna, situado en una roca que se adentra en el mar. Este castillo, que data del siglo XIII, ofrece unas vistas panorámicas impresionantes para quienes suben hasta él, siendo un lugar ideal para explorar en familia y aproximarse a la historia de este litoral mediterráneo.
Las playas de Peñíscola son famosas por su belleza. La Playa Norte, con su arena fina y aguas cristalinas, es perfecta para el disfrute de toda la familia. La playa sur, más estática por la protección del puerto, ofrece un lugar ideal de juegos para los más pequeños, ya que las aguas calmadas y poco profundas son un icono para el aprendizaje del baño.
A pesar de la popularidad de Peñíscola, existe una tendencia creciente entre las familias que se basa en buscar establecimientos que ofrezcan un ambiente tranquilo y acogedor.
Estos viajeros, que valoran la tranquilidad y la seguridad por encima del bullicio y la aglomeración son todo un nicho por explorar.
Establecimientos como el Hotel Blason Junior, situado en el corazón urbano se encuentra a escasos 500 metros de la Playa Norte y a 100m. de la playa sur, cubre esta demanda con creces ya que, además, apuesta por habitaciones grandes que no necesitan de camas supletorias para responder a las familias.
“Cada vez son más las familias que, sin querer renunciar a estar céntricos, buscan alojamientos más específicos en los que las familias puedan estar tranquilas y disfrutar de las vacaciones sin complicaciones. La posibilidad de disponer de habitaciones amplias para todos y con incluso terraza, permite adecuar horarios sin necesidad de renunciar a estar cerca de todo” explican desde el establecimiento.