El bosque y el Caribe rodean las 48 casetas del hotel Azulik hechas con materiales naturales, un refugio para adultos donde podrá degustar la mejor cocina maya, meditar, mimarse en el spa, comprar artesanías en su boutique y bañarse en una de ellas.
Muchos cenotes escondidos en esta parte de la costa mexicana, muy cerca de las ruinas de Tulum. El agua es el elemento central de este santuario, ubicado en el paraíso yucateco, construido parcialmente para que los manglares envuelvan la estructura.
Los canales de agua y los pasillos de madera conectan este laberinto excéntrico y extraño, conectando el lobby con villas, spa, tres restaurantes o áreas de meditación. Las suites privadas Acqua, Aztec, Jungle, Maya, Moon, Sea o Sky cuentan con bañeras hechas de piedras volcánicas locales, terrazas abiertas con impresionantes vistas al mar y la naturaleza, camas tamaño king hechas con bosques locales y una arquitectura retorcida especial. Además, ofrecen una fusión de cocina maya y vanguardista, asiática o tradicional mexicana en sus restaurantes colgantes, y una extensa carta de masajes y tratamientos en su spa, incluyendo los famosos temazcales, baños de vapor.
Pero quizás lo más interesante es la galería de arte IK Lab, que muestra las últimas obras contemporáneas de artistas como Katinka Bock en el fin del mundo, la idea del partidario de Roth de todo el proyecto.
Azulik Uh May, recientemente inaugurado y también integrado en las instalaciones, es un laboratorio de ideas que promueve proyectos de sostenibilidad, arte, artesanía, diseño y moda bajo los auspicios de la fundación Neira Enchanting Transformation.
“Queremos que los más grandes creadores de nuestro tiempo se reúnan, para animarlos a explorar nuevas formas de reconectar como individuos y comunidades unidos por el deseo de aprender de las culturas ancestrales para vivir en armonía con la naturaleza”, dice Neira.
Hotel Azulik
Carretera Tulum Ruins Km 5 Zona Hotelera, 77780 Tulum, Quintana Roo, México.
