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¿Qué ver y hacer en un viaje a Helsinki? Planes baratos en Helsinki… Conoce la comida típica y los lugares clave.
Si de arquitectura hablamos, empezamos con los singulares edificios de Alvar Aalto y el amor que la ciudad profesa por el diseño más vanguardista, mezclado con cafeterías de estilo deco e infinidad de museos, que se han combinado para crear uno de los destinos más estimulantes que cualquier viajero puede encontrar. Pero queremos hacer un resumen de los mejores planes y por ello nos informamos en Vive Finlandia.
¿Qué visitar exactamente en Helsinki?
Antes de que te abrumes con la interminable oferta de esta ciudad, en Vive Finlandia nos aconsejan lugares estupendos para disfrutar de Helsinki. Ya nos vemos en eso de pasear por el casco antiguo, relajarnos en la sauna tradicional o degustando la comida local en los mejores mercados de la ciudad.
LA COMIDA TÍPICA DE HELSINKI. OBLIGADO.
Hay que probar la comida típica, sobre todo porque comer barato en Helsinki y disfrutar de una cocina diferente es lo más parecido a un lujo. Comer barato en Helsinki no es poca cosa, y eso que la capital finlandesa no es una ciudad especialmente barata. Los salarios en Finlandia están entre los más altos de Europa y eso se nota en los precios de los servicios: hoteles, restaurantes, supermercados… Una de las pocas cosas que tiene un precio similar al resto de Europa es el transporte público, pero algunos de los mejores restaurantes para comer bien tienen un precio asequible. En Vive Finlandia tienes información de algunos de los mejores.
VISITAR LA CATEDRAL DE HELSINKI
Si, hay que visitar la Catedral de Helsinki, ya que entrar es gratis y esta oportunidad no se la puede dejar escapar. Así es que si, este es un plan SI o SI. Si hay que asociar la imagen de Helsinki, la capital de Finlandia, con un monumento excepcional, debe ser el de su catedral luterana. Sin embargo, la iglesia de adoración luterana tiene una imagen completamente diferente a muchas otras.
También conocida como la Catedral Blanca por su igualmente llamativa fachada blanca, se erige majestuosamente en el lado norte de la muy amplia y peatonal Plaza del Senado, el centro monumental de Helsinki. Situada sobre una colina, en el trazado que encargó el arquitecto alemán Carl Engel para la construcción del conjunto urbanístico de dicha plaza, la nueva catedral iba a adquirir un gran protagonismo.
El edificio de la Catedral de Helsinki fue construido entre 1830 y 1952 en un estilo arquitectónico neoclásico, y siguiendo la tendencia marcada por la Catedral de Kazan en San Petersburgo, que fue construida en 1811. Inicialmente fue bautizada como Iglesia de San Nicolás, en honor al zar ruso Nicolás I, pero tras la salida de los rusos de Finlandia pasó a ser la Gran Catedral, y a mediados del siglo XX pasó a ser la Catedral de Helsinki.
Con planta en forma de cruz griega, en su interior hay muy pocos elementos arquitectónicos o artísticos reseñables, lo que demuestra una gran austeridad. Así, se puede ver un retablo que Nicolás I donó en su momento, con el tema del entierro de Jesucristo. Y nada más que un púlpito y un gran órgano moderno.
Más planes baratos
No se nos pueden olvidar los museos, visitar la biblioteca de Helsinki, los parques…
Plaza del Senado y su fuente
La Plaza del Senado impresiona por su tamaño. Doblando la calle encuentras elegantes y coloridos edificios, la casa de piedra más antigua de Helsinki, la fuente central donde turistas y lugareños acuden a sentarse en los bancos que la rodean, para disfrutar tranquilamente del principal atractivo de la plaza: la majestuosa catedral Tuomiokirkko.
DORMIR EN UNA CÁRCEL
Helsinki ofrece escapadas rápidas y seguras de la vida cotidiana. Uno de los planes más curiosos es dormir en lo que antiguamente fue una cárcel y hoy es un hotel. No es necesario cometer un delito para dormir en la cárcel de Helsinki. El hotel Katajanokka, ubicado en el corazón de la capital finlandesa, está construido en una antigua prisión.
Entre sus viejos muros de ladrillo, se abre un fascinante mundo de contrastes en este punto de acceso único de Helsinki: un moderno hotel de primera clase construido en una prisión histórica. También es el primer hotel Marriott en Finlandia.
Hotel Rantapuisto, en Vuosaari. Fuerte de Suomenlinna.
Quizás prefieras alejarte del bullicio de la ciudad y alojarte en un hotel conectado con la naturaleza. En Vuosaari tienes una opción muy interesante, el hotel Rantapuisto. Este hotel está integrado en la naturaleza presente en Vuosaari y está a tiro de piedra del mar.
Uno de los lugares casi obligados que ver en Helsinki es la famosa isla de Suomenlinna, aunque en rigor esta conocida isla son en realidad seis islas conectadas por puentes sobre las que está construida la fortaleza de Suomenlinna, considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La construcción de la fortaleza fue ordenada por Suecia en 1748, con la idea de protegerse de la expansión que estaba experimentando la Rusia Imperial en ese momento. Sin embargo, la fortaleza se rindió a Rusia sin luchar en la Guerra de Finlandia de 1808 y fue utilizada por Rusia durante 110 años. Hoy, la isla es el hogar de casi 800 familias. Los antiguos búnkeres, ahora cubiertos de maleza, recuerdan a las casas recreativas de El Señor de los Anillos.
Se puede llegar a la isla de Suomenlinna en ferry desde Kauppatori, Market Square o lo que pensé que era el puerto de Helsinki. El trayecto dura solo 15 minutos y el precio de ida y vuelta ronda los 5€, aunque si compras una tarjeta de transporte también puedes gastarlo en el ferry. En verano, el último ferry sale de la isla a las 2 de la mañana.
Si te animas, también puedes visitar alguna de las otras 300 islas que componen el archipiélago de Helsinki y donde, en verano, puedes practicar infinidad de actividades. Las más visitadas son Pihlajasaari, Harakka, Uunisaari, Lonna, Vartiosaari, Mustasaari o Kaunissaari, esta última a cuarenta minutos donde en verano puedes disfrutar de las playas de arena si te animas a acampar.
